Soy psicóloga general sanitaria. Me licencié a principios de los noventa en Psicología Clínica en la Universidad Complutense de Madrid y, desde entonces, no he dejado de trabajar y formarme.

Nada más terminar la carrera, comencé a trabajar en el área de adicciones, sector en el que permanecí 16 años.

Fue entonces cuando empecé a identificar las dificultades añadidas de las mujeres en cuanto a trabajo de su salud mental se refiere y la transversalidad del trauma en todos los contextos y trastornos de las personas con las que trabajaba. 

Esto me impulsó a especializarme en psicotraumatología.

Actualmente desarrollo mi actividad profesional en dos sectores: el área social y el sector privado. En el primero, trabajo con mujeres en riesgo de exclusión, realizando grupos psicoterapéuticos y atendiendo de manera individual. En el sector privado, hago psicoterapia individual con personas adultas.

Una de mis últimas formaciones más relevantes ha sido la del abordaje que yo considero más potente para trabajar en mi especialidad, que no es otro que el EMDR (en otro apartado os hablo más sobre en qué consiste). Me ha facilitado una visión de la terapia que no había conseguido hasta entonces; por eso, sigo ampliando conocimientos en ello.